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Récord de cheques rechazados por falta de fondos: más de 92.000 en septiembre y hogares al límite

Según datos del Instituto Argentina Grande, durante septiembre se registraron 92.535 cheques rechazados por falta de fondos, la cifra más alta desde junio de 2020. El aumento coincide con crecientes niveles de endeudamiento familiar y morosidad financiera. 

Récord de cheques rechazados por falta de fondos: más de 92.000 en septiembre y hogares al límite

Durante el mes de septiembre de 2025, la economía doméstica argentina enfrentó una nueva señal de tensión: se rechazaron un total de 92.535 cheques por falta de fondos, según el análisis realizado por el Instituto Argentina Grande sobre datos del Banco Central de la República Argentina. Esta cifra marca un punto máximo desde junio de 2020 y evidencia la profunda fragilidad en la cadena de pagos y del consumo.

El informe señala que la deuda de los hogares respecto a los ingresos ya supera el 130 % del ingreso promedio individual. La mora en los préstamos del sistema financiero alcanzó el 3,7% para el total de préstamos, mientras que los atrasos de las familias subieron al 6,6%, y en el caso de las tarjetas de crédito el nivel llegó al 6,7 % en agosto.

En el segmento de pymes, el 21,3 % se endeudó para pagar impuestos, y un 20,5 % lo hizo para afrontar salarios o aguinaldos. Además, el 59 % dijo que sus clientes extendieron plazos de pago y el 47 % reportó mayor incumplimiento.

Esta situación representa que muchas familias y empresas ya no cubren ni los gastos corrientes con ingresos o crédito, lo que indica una contracción del consumo y un aumento de la vulnerabilidad financiera.

Además, una cadena de pagos que se interrumpe, cuando muchos cheques rebotan, provoca efectos de arrastre sobre proveedores, salarios, impuestos y actividad económica general.

Por último, el contexto sugiere que las medidas económicas vigentes, como ajustes, inflación, restricciones y caída del poder adquisitivo, están golpeando de lleno tanto a las finanzas personales como al entramado productivo. Sin liquidación fuerte de deudas, refinanciación y recuperación del salario real, la demanda interna podría continuar debilitándose.