MOSCU.- Los problemas para el seleccionado argentino parecen haber empezado demasiado pronto en el Mundial. O bien se podría decir que el 1 a 1 con Islandia es la continuidad de lo que fue la preparación de estos últimos meses, llena de contratiempos y dudas. Caras largas por haber preparado mucho tiempo un partido en el que no salió nada y, además, porque la igualdad ante el rival más débil del grupo no le deja lugar para futuro tropiezos: la Argentina mirará la tabla de posiciones, seguramente, con la calculadora en mano para pasar a octavos.
Ni la alegría por el golazo de Agüero, ni el alivio por el penal que le cometieron a Meza. Islandia le empató rápido al seleccionado y Lionel Messi erró un penal. Maleficio, cosa rara. El capitán argentino erró un penal cuando la Argentina necesitaba un salvavidas para salir a flote de un partido enmarañado. El diez argentino fue un imán, todo pasó por sus pies. Poco juego colectivo y un esquema que no dio resultado.
"En el primer tiempo el equipo no tuvo la velocidad de juego que requería el partido", dijo Sampaoli tras el partido.
El penal que erró Messi
Los goles del partido