El agotamiento mental o “burnout” es un estado de cansancio emocional, mental y físico causado por un estrés excesivo y prolongado, que se extiende tanto en la vida personal como laboral.
Ocurre cuando uno se siente abrumado, emocionalmente agotado e incapaz de satisfacer las demandas constantes. A medida que el estrés continúa, uno empieza a perder el interés y la motivación de lo que hace o de su rol.
Los estudios demuestran que aumentar las emociones positivas, generan como consecuencia un mejor estado físico-mental del cuerpo. Está comprobado que reírse en el trabajo es un negocio serio. Los trabajadores se sienten 8 veces más comprometidos con su empresa y son 3,5 veces más creativos e innovadores, cuando el bienestar es una prioridad.
Un trabajador activo rinde más que un trabajador sedentario. Personas felices en armonía con su cuerpo-mente, trabajan más y mejor. El mundo corporativo está cambiando y la tendencia apunta a cuidar a los empleados por sobre todas las cosas.
Debido a que el agotamiento puede causar cambios a largo plazo en el cuerpo que lo hacen vulnerable a sufrir lesiones y/o adquirir enfermedades como resfríos y gripe, es importante llevar a cabo ciertas acciones saludables que permitan sobrellevar el fin de año de la mejor manera posible.
Existen diversas actividades que se pueden implementar en la oficina y/o ámbito laboral para disminuir esa sensación de cansancio:
Pausas Activas: Implementar sesiones de 5 / 10 minutos con ejercicios suaves de movilidad y estiramiento. Además de quemar calorías, brindan beneficios que se vinculan con una mejor calidad de vida y repercute en un mejor rendimiento laboral.
Plan de Nutrición: Incorporar la presencia de una nutricionista en la empresa suele tener alto impacto debido a que ayuda a los empleados a conocer alternativas de alimentación sana. A su vez, acompaña a quienes lo necesitan realizando planes de nutrición personalizados, que luego impactan en el rendimiento laboral, ya que el cuerpo funciona mejor al estar en equilibrio.
Clases de yoga: Al ser una disciplina que une, cuerpo, mente y alma, le permite a los empleados tener un espacio de trabajo físico-mental que potenciará sus habilidades al máximo.
Masajes: Cuando se habla de masajes se hace alusión a la prevención, aconsejando a cada persona tratada de acuerdo a su condición física, posiciones ergonómicas de trabajo para disminuir el riesgo de lesiones y realizar sus tareas de forma más descansada. A su vez mejorar la actitud y motivación, alivian tensiones, mejoran la productividad y generan el aumento de la circulación local, reduciendo las contracturas musculares.