Hay dos causas donde el denominador común es la presunta extorsión y espionaje: el caso D´Alessio llevada por el juez Alejo Ramos Padilla y la mafia de los contenedores por Luis Rodríguez. 

El caso D´Alessio se vincula con la denuncia realizada por el productor agropecuario Pedro Etchebest, quien acusó tanto a Carlos Stornelli, como al abogado Marcelo D´Alessio, de haberlo extorsionado con el pago de coimas para desligarlo de la causa cuadernos en la cual según este último, Etchebest figuraba

La mafia de los contenedores por su parte involucra a depósitos que llegaban desde China a la Argentina con varias toneladas de telas pero donde tras la alteración de los datos de cada carga se buscaba pagar aranceles aduaneros inferiores a los correspondientes.

Un nuevo capítulo con los involucrados en este último punto tuvo lugar en el día de ayer cuando el ex jefe de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE), Antonio “Jaime” Stiuso, solicitó ser considerado como querellante en el marco de una causa derivada del expediente públicamente conocido como “mafia de los contenedores”. 

En el día de ayer Stiuso presentó un escrito desde el cual se introduce como presunta víctima de una red de espionaje y extorsión donde resaltan el falso abogado Marcelo D´Alessio y el fiscal de Mercedes, Juan Ignacio Bidone, ambos procesados. 

Según el ex espía, quien se aleja de la Secretaría sobre finales del año 2015, es en el marco de esta derivación judicial que se observa una mecánica que recorre el siguiente camino: “Se obtiene información ilegal, se falsean datos, se hace una presentación judicial, se viraliza, se crea la noticia y se lleva adelante la extorsión". 

¿Cómo surgen los nombres de Carrió y Santoro?

Stiuso planteó que las alegadas operaciones en su contra comenzaron con una denuncia realizada por el ex director de Aduanas y hoy precandidato a presidente, Juan Juan José Gómez Centurión. 

En ese caso fue que la diputada nacional Elisa Carrió habría reforzado esta denuncia sobre el agente acusándolo por hechos de contrabando, algo que según esta versión resultó amplificado por el periodista Daniel Santoro. 

“No me sorprende este tipo de relaciones. He podido saber de periodistas que se vinculan con operadores o bien de periodistas que no son tales sino simples fabricadores de noticias", marca el escrito presentado.