Vecinos de los barrios de Constitución y San Telmo y organizaciones civiles realizaron esta noche una protesta con velas frente a la sucursal del supermercado Coto, en la avenida Brasil y Perú. Reclamaron justicia por el asesinato de Vicente Ferrer, un hombre de 68 años, que el viernes último fue echado a golpes del local por dos custodios tras robar dos chocolates, un trozo de queso y una botella de aceite.

La víctima, según trascendió, padecía de demencia senil, y de acuerdo con testigos presenciales, los empleados de seguridad le dieron puñetazos y patadas en el interior del local y a la salida, a pesar de haber recuperado los productos.

"Volvía de la casa de mis padres a las 19 y en la cuadra del Coto vi que había mucha gente alrededor del hombre intentando reanimarlo" , relató el fotógrafo Nicolás Ramos, quien divulgó una imagen del hecho. "La policía intentaba que la gente no viera al hombre que estaba fallecido", agregó.

Yolanda, empleada de una panadería del barrio, aportó datos sobre lo sucedido. Contó que vio una discusión entre el personal de seguridad del supermercado y Ferrer, quien al ser retenido, arrojó al suelo la botella de aceite de oliva que había hurtado.

La mujer fue testigo del forcejeo entre los custodios y la víctima, que terminó con Ferrer reducido, boca abajo contra el piso, "quejándose porque no podía respirar. Pedía que lo suelten". 

El hombre perdió el conocimiento, y ante la demora en la llegada de una ambulancia del SAME, efectivos policiales le practicaron maniobras de resucitación cardiopulmonar (RCP). La víctima luego fue trasladada al hospital Argerich, en La Boca, donde a las 19.45 se constató su fallecimiento.

De acuerdo al informe preliminar de la autopsia, Ferrer murió debido a una hemorragia cerebral.

Intervino en la causa el juez Darío Bonanno, que ordenó la detención de los implicados en el hecho, identificados como Gabriel Alejandro De la Rosa y Ramón Cerafín Chávez, por el delito de homicidio.