Ir al contenido
Logo
Ciencia

Misteriosas 'ráfagas rápidas de radio' se disparan rítmicamente a través del cosmos

¿De donde vienen estas señales y por qué su origen causa tanta controversia en la comunidad científica? ¿Hay vida en otros planetas? Contesta esto y mucho más Gustavo Esteban Romero, doctor en Física e investigador superior del CONICET. 

Misteriosas 'ráfagas rápidas de radio' se disparan rítmicamente a través del cosmos

Una de las características definitorias de las misteriosas señales del espacio profundo que llamamos ráfagas rápidas de radio es que son impredecibles, lo que las hace increíblemente difíciles de estudiar.

Sin embargo, un equipo de astrónomos encontró recientemente una ráfaga rápida de radio (FRB) que se repite en un ciclo regular. La investigación se informó por primera vez en febrero de 2020 cuando se cargó en el servidor de preimpresión arXiv, y ahora se publicó en Nature.

Para conocer un poco más sobre este fenómeno, Filo.News habló con Gustavo Esteban Romero, doctor en Física, Director del Instituto Argentino de Radioastronomía, profesor de Astrofísica Relativista en la UNLP e investigador superior del CONICET. 

Romero comienza explicando que estos pulsos de radio generados en el espacio y detectados por radiotelescopios son "pequeñas explosiones que duran aproximadamente un milisegundo en ondas de radio de baja frecuencia", específicamente alrededor 1.4 GHz, un poco más arriba que las radios fm.

Se han detectado desde el año 2007 varias decenas de estas erupciones en radio, y su origen ha sido tema de controversia entre los científicos; por un lado, porque es muy difícil explicar un pulso tan intenso y tan breve con un origen convencional en el área de la astrofísica, y por otro, porque algunos de estos pulsos, se descubrió a partir del año 2012, se repiten en el tiempo.

"No son simplemente episodios que ocurren una vez y nunca más, sino que algunos de ellos, no todos, parecen repetir. Los hay que repiten con cierta periodicidad, y otros que no tienen una aparente periodicidad o aún se está buscando", agrega. 

A la hora de tratar de interpretar qué son, el físico sostiene que lo primero que hay que tener en cuenta es cuál es la energía necesaria para producirlos; y que en eso, algunas pistas podemos tener: "Ya que nosotros medimos la intensidad de la señal que llega a la Tierra, y como en algunos casos conocemos la distancia aproximada a la cual estos pulsos se producen, podemos [a partir de esa intensidad recibida] inferir cuál era la potencia original en la fuente que lo emitió".

"Esa potencia es gigantesca", continúa. "Es mucho más grande, por ejemplo, que la energía que emite el Sol en un segundo, pero emitida en una milésima de segundo. Hay muy pocos objetos en el universo que pueden tener una energética tan fuerte, y producir variaciones en escalas de tiempo tan cortas". 

A su vez, afirma que las escalas de tiempo cortas implican también que el objeto tiene que ser muy compacto. Entonces, los candidatos actualmente son, o bien agujeros negros que producen "chorros de plasma relativistas", o las llamados estrellas de neutrones, objetos muy compactos con un tamaño de unos diez kilómetros de radio pero una masa del orden de la del Sol. 


El telescopio CHIME (Canadian Hydrogen Intensity Mapping Experiment) ubicado en una instalación del Consejo Nacional de Investigación de Canadá.

Por otro lado, el investigador señala que la cuestión a descifrar es, en principio, por qué duran tan poco los pulsos. Y el segundo problema es por qué repiten: "Al parecer, las fuentes que los originan están en un sistema binario de estrellas. Si una de ellas colapsó y formó uno de estos objetos compactos, el objeto se va a mover alrededor de la estrella que aún no colapsó. Cuando entra en el campo de radiación de la estrella, la emisión de radio es suprimida, como una especie de interferencia por parte de la estrella. Recién cuando sale de ahí, la emisión en radio vuelve a producirse. Entonces, eso hace que la señal aparezca con una periodicidad que más o menos es del orden del tiempo que le lleva al objeto compacto describir una órbita alrededor de la estrella".

Finalmente, respecto a la posibilidad de vida en otros planetas, Romero sostiene que hay muchos sistemas planetarios que perfectamente podrían tener condiciones para que evolucione la vida, pero que al ser este un proceso tan largo y complejo que depende de las circunstancias locales, difícilmente pueda producir resultados similares. "Lo que pienso es que probablemente haya vida en el universo, pero casi sin lugar a dudas va a ser extremadamente diferente a la vida que conocemos en la Tierra, porque las circunstancias evolutivas deben haber sido muy distintas", concluye.

Asimismo, explica que no es completamente descabellado que hayan desarrollado tecnologías que pueden producir ondas de radio. "Es muy probable que haya vida inteligente en el universo, ahora que esa vida pueda comunicarse con otros organismos ya es una cuestión bastante más compleja y de difícil respuesta en este momento", señala. "Con total seguridad, [la ráfaga rápida de radio] se trata de un fenómeno natural". 

    Ultimas Noticias