El anteúltimo episodio de Game of Thrones dejó a muchos fanáticos decepcionados e insatisfechos, en parte por su inconsistencia narrativa y en parte porque le ofreció un final poco digno a Cersei, uno de los mejores personajes que nos ha regalado la serie y uno de los que menos vimos durante esta última temporada.

La ausencia de Cersei y su pasividad durante el último episodio fueron notorias. La Reina que había destruido cualquier vínculo, conexión o alianza se mostró en absoluta negación mientras Daenerys destruía Desembarco del Rey. Fue ese retraso en aceptar la derrota la que le costó la vida.

Pero muchos fanáticos consideran que sin cuerpo no hay confirmación y sin confirmación hay esperanza. La propia actriz Lena Headey confesó durante una entrevista que inicialmente se decepcionó por lo poco que tuvo que ver la muerte de Cersei con cómo vivió: “¡Quería que tuviera una gran escena o una pelea con alguien!,” le dijo a Entertainment Weekly.

“Necesito la prueba de la muerte de Cersei,” escribió una usuaria en Twitter. “No voy a aceptar su muerte sin la prueba. Porque si Arya pudo sobrevivir piedras y humo y fuego y quedarse atrapada, Cersei podría sobrevivir a unas piedras.”

No sería la primera vez que la serie da a entender la muerte de un personaje para luego mostrar que había sobrevivido. Sin ir más lejos, durante la Batalla de Winterfell vimos a Brienne y Jaime ser sobrepasados por zombies y salir airosos varias veces. Aún así no hay muchas razones para que ese sea el caso de Cersei, ya que si bien el desarrollo de su personaje durante esos minutos finales estuvo un tanto acelerado (como todos), morir en los brazos de su hermano bajo el peso de todo lo que habían luchado, sangrado y matado para conseguir tiene sentido.

Por otro lado, como discutimos ayer cuando hablábamos de lo que podía deparar a Arya en el último episodio, este final terminó de completar la profecía de “Maggy la rana” que nunca había sido especificada en la serie, solo que no de la forma violenta en la que los fanáticos esperaban.

Por mucho que nos duela, todo parece indicar que hemos visto lo último de Cersei. La gran ganadora fue Headey quien, como bien destacó un usuario en Twitter, “cobró un millón de dólares por episodio en esta temporada sólo para estar parada frente a una ventana tomando un vaso de vino.”

La actriz fue nominada cuatro veces al Premio Emmy y una al Globo de Oro por su interpretación y nunca se llevó un galardón. Esperemos que su poca presencia en esta temporada no le robe el derecho a un merecido premio.