“Soy igual a todos ustedes”: Una crónica del debut histórico de Duki en River
Este sábado 2 de diciembre, el cantante protagonizó un tributo a la música urbana en El Monumental, con la participación de figuras que fueron parte de su trayectoria.
"Duko acaba de llegar, puse los pies sobre la tierra y puede pasar lo que sea", adelantaba con certeza en Caja Negra, en una suerte de primicia. Aunque su presentimiento no falló, ni él ni sus seguidores estaban preparados para lo que se avecinaba: la consagración en dos shows sold out en el Estadio River Plate (2 y 3 de diciembre). Y, a pesar de haber mencionado en varias ocasiones que todo era parte de un sueño, alrededor de 75 mil personas fueron testigos de aquello que parecía tan inimaginable, una primera noche que marcó un antes y un después en la historia del trap argentino. Tan sólo cuarenta canciones le tomó, a lo largo de un poco más de dos horas, para situarse como un artista difícil de clasificar, un cantante al que no le importa encuadrar en los cánones de la industria.
En la previa, la extensión del campo rebosaba de juventud: adolescentes y veinteañeros que parecían reflejarse en él. El espectáculo, en palabras de Duki, abrazaba esa identidad compartida: "Yo no me voy a hacer el rockstar, el John Lennon, el Slash, yo soy Mauro Ezequiel Lombardo y soy igual que todos ustedes". La ansiedad palpitaba en los cuerpos mientras tomaban un respiro antes de entregarse al ritmo de los grandes éxitos, de la mano de los teloneros CNO, Klan y Acru. El clímax de la emoción dio inicio con la tan esperada hora: las 21:00. Tras un breve retraso de quince minutos que intensificó la expectativa, los acordes de "Givenchy" inundaron el estadio. Aunque logró concluir este tema con éxito, el segundo, "Otro Level", se vio interrumpido debido a la agitación del público. Inmediatamente, solicitó facilitar el paso a aquellos que se encontraban mal para poder proseguir con el espectáculo.
Una vez que el público recuperó la calma, el rapero, siendo el más joven en llenar el estadio, retomó su actuación con "Tumbando el Club". En el primer tramo del recital, lució un aspecto renovado: trenzas y un conjunto completamente negro, transportando a los presentes a un escenario que evocaba un paisaje marciano. Envuelto en una escenografía que lo llevó a través de diversos paisajes, aunque todos conectados por la misma esencia universal, el show se vio adornado con referencias a galaxias, desiertos rocosos, erupciones volcánicas y otros fenómenos geográficos, todo ello formando parte del telón de fondo de su actuación. Las pantallas LED acompañaron con visuales que hacían más real aquella fantasía que presentó en su último álbum “Antes de Ameri”.
Entre tema y tema, el rapero tomó la palabra para dirigirse a sus seguidores. Expresó su gratitud hacia al público, remarcando la fortaleza de los argentinos como "grandes soñadores", y compartió su experiencia personal con la tristeza. "El otro día yo me levanté de la conferencia triste porque estaba angustiado y había gente que comentaba ‘uy este pibe es multimillonario no le falta nada’”, compartió emocionado, para luego añadir: "No importa cuánta plata tengas, lo importante es cómo te sentís por dentro. Si estás triste hablalo, contalo, decíselo a la gente. No tengan miedo de estar tristes, es lo que te hace fuerte”. “Soy hombre y lloro desde que nací, y gracias a eso me hice fuerte. Así que todos los que dicen que llorar y estar triste está mal son todos unos cagones y no tienen huevos", expresó y concluyó: "Si tienen que llorar, lloren, y si tienen que estar tristes, díganlo. Y si alguien les dice cagón, le responden ‘cagón sos vos por no querer mostrarlo, gil’”.
Duki, un "fusionador" de talento
El evento no sólo fue una exhibición del talento individual, sino también un escenario para la colaboración artística. Después de emocionar a la audiencia, el trapero retomó el impulso con la interpretación de "Como si no importara", sorprendiendo a todos con la presencia repentina de Emilia Mernes, su novia. Los gritos enloquecidos de los fanáticos se elevaron, sellando el momento con un beso que conmovió a los presentes. "Gracias por amarlo tanto", expresó la artista pop, entre risas cómplices con su pareja y una mirada que reflejaba su palpable orgullo. Pero la participación de la cantante no fue la única sorpresa de la noche. Tras el show del dúo, Khea se sumó al escenario para interpretar "Wacha" y "Hit Boy". Antes de un breve receso, el estadio saltó al ritmo de "Aeróbico Remix", con la participación de Bhavi,Milo J y LIT Killah.
El trap parecía no agotarse. “Troya", "01 de enero" y "Rockstar" fueron algunas de las tantas canciones que le siguieron. Mientras el rap fluía en sus labios, no podía esconder su sonrisa: "Al principio, temía que esto no volviera a ocurrir, pero ahora que los veo a todos aquí, sé que sucederá de nuevo. Y no solo una vez más, sino todas las veces que deseen. Siempre que estén, yo también estaré". Luego, en esa misma línea, recordó sus inicios con Modo Diablo: “Para el que me conoce hace poco, Modo Diablo fue el grupo, fue la segunda familia que yo tuve, que conformamos con YSY A, con Neo Pistea, las personas que me acompañaron al principio cuando tenía pánico escénico, no sabía pararme en un escenario, no sabía rapear, ellos me acompañaron toda mi primera gira de verano porque yo no estaba listo para hacerlo, tenía miedo y ellos accedieron dejando de lado su ego, nombre y ayudándome a mí a crecer y eso se los voy a agradecer toda la vida. Modo Diablo es el pasado, presente y futuro de este género musical”.
Paseando sus 27 años por todo el escenario, adelantaba el cierre de lo que fue, quizás, la mejor medida de popularidad que alcanzó Duki durante su carrera. No obstante, el compositor aún guardaba más ases bajo la manga y los invitados continuaban llegando. Una de las sorpresas fue la aparición de Nicki Nicole, quien irrumpió en el escenario para interpretar "Ya Me Fui". Acto seguido, se unió Bizarrap, desencadenando un frenesí en el estadio con la session Vol.50. Ya habíamos pasado por sus comienzos, ahora llegaba la hora de su presente. Fue entonces cuando FMK, Tiago PZK, Emilia, Rusherking, Lit Killah y Big One se sumaron al escenario para dar vida -o, más vida- a "Los del Espacio".
Con el explosivo cierre marcado por los temas "Bis Rayo", "Ticket" y "Goteo", la noche se despidió en una mezcla de emociones. Cuando parecía que se iba del escenario, sorprendió a todos entonando uno de sus himnos más emblemáticos, aquel que lo llevó a la cima en el 2017: “She don’t give a FO”. El público se entregó al éxtasis de la canción, y justo cuando la melodía se desvanecía, una exhibición de fuegos artificiales decoró el cielo, poniendo un punto final al primero de lo que seguro serán muchos Rivers.