La Perra que los Parió (LPQLP) y Edu Schmidt, ex Árbol, se unieron en un show electrofónico, donde revivieron grandes éxitos de ambas bandas de rock y también repasaron el repertorio solista del violinista. En las dos horas de concierto que dieron, emocionaron a más de una persona, que por unos minutos volvió a la adolescencia.

Pasadas las 20.30, muy puntual, se abrió el telón del Teatro Roma de Avellaneda, para que La Perra ft. Edu Schmidt salgan a la escena con toda una declaración política, como lo suelen hacer los artistas, de la mano de HDP de LPQLP.

Siguieron con un poco de cumbia, con Chicanorexika de Árbol, intercalaron con Cómo evitar que sangremos de LPQLP y después metieron un poco de folclore con Enroscao del repertorio solista de Schmidt.

Hacia el final, hicieron un repaso del repertorio más éxitoso tanto de La Perra como de Árbol. Interpretaron Fuego eterno, Lo que nunca te dije y Reino de LPQLP y Pequeños sueños, Fantasma, Trenes, camiones y tractores de Árbol.

Durante el concierto hubo varias alusiones a las políticas neoliberales que lleva a cabo el Gobierno, pero definitivamente una de las más fuertes fue durante el cierre, que estuvo a cargo de La Perra Disco Bar de LPQLP, donde realiza homenajes a bandas del rock nacional, entre ellas La rubia tarada de Sumo, Lo artesanal de Viejas Locas y Cutral-co de Las Manos de Filippi que en un contexto de crisis social y económica del 2001, de la mano del que se vayan todos, cantaba "hay que matar al presidente, hay que matarlos a todos"; y La Vida de Árbol.