"Aquí les comparto lo más íntimo y doloroso de mi vida, desde un lugar de aceptación, revisando el pasado para poder abrazar el presente con una nueva consciencia, simple y consciente que me lleve a lugares más bonitos y de evolución", Así presentaba Silvina Luna, "Simple y consciente": un viaje sanador físico, mental y espiritual, el libro autobiográfico que escribió para ayudar a los demás y contar el proceso de aceptación que tuvo que pasar. 

"En este libro repaso mi pasado, cuento acontecimientos de mi vida que me marcaron, con los que seguro se van a sentir identificad@s. Ciertas decisiones y acciones tuvieron sus consecuencias, al punto de perder mi salud", expresaba hace poco menos de 1 año. 

Más precisamente el 1 de diciembre de 2022, la modelo publicó este material autobiográfico, en el que plasmó el nuevo recorrido de sus días a partir del hecho que la llevó a enfrentarse a un diagnóstico en el que le comunicaron que le quedaba poco tiempo de vida. 

En 192 páginas, abrió su corazón y reflexionó con el fin de buscar su “bienestar, energía, ganas de estar mejor y valentía para transformarnos”.

“El día que me dieron el diagnóstico, subí a mi auto, en ese momento vivía en México, y todavía no puedo recordar qué pasó en esas dos horas después de que salí de la clínica. Me despertó de ese trance el llamado de una amiga preocupada porque yo no contestaba el teléfono. (...) Después de mucho tiempo, empecé a preguntar cuál era mi vocación, qué sentido tenía mi vida y ahí comencé a aceptar todo. Creo que nunca había aceptado nada de lo que me pasaba en la vida”, expresa en uno de los párrafos del libro. 

"El primer médico que me trató me preguntó qué era lo que más me gustaba en la vida y le contesté que la playa y el mar. Me dijo `bueno andá a disfrutarlo`. Durante dos días visité varios médicos y un genetista me dijo que mi tumor pertenecía a una familia determinada y que podían operarme. Fui a cirugía, siempre se mantenía el pronóstico de que me quedaban pocos meses de vida", relata en otro de los párrafos. 

"Creí eso, y seguí creyéndolo, creo que me queda en número "X" de meses y así vivo, y aunque suene raro está buenísimo saber que nos vamos a morir. Para vivir, esa fue la maestría, saber que voy a morir". 

Finalmente este jueves 31 de agosto, Silvina Luna falleció luego de estar internada 79 días en el Hospital Italiano después de que contrajera una infección bacteriana, que afectó sus pulmones y complicó su delicado cuadro de hipercalcemia e insuficiencia renal derivado de la operación estética que se realizó en 2011 con Aníbal Lotocki.